Serigrafía
Serigrafía profesional a tu alcance
¿QUÉ ES LA SERIGRAFÍA?
La serigrafía es un procedimiento que utiliza una pantalla de tela emulsionada para estampar una amplia gama de materiales: tela, cartones, plásticos, maderas, metales, metacrilato, cerámica, papel, etc.
Es una de las técnicas de impresión más conocida y la más utilizada para imprimir diseños en productos de distintos tamaños y materiales; al ser aplicable a:
- Prendas de vestir, como las camisetas personalizadas.
- Adhesivos, fundas para tarjetas o muestrarios.
- Carpetería, dossieres y calendarios.
- Bolsas de tela, plástico o papel.
- Parasoles, portadocumentos y otros artículos promocionales del sector automovilístico.
- Todo tipo de bolígrafos, mecheros, tazas, unidades de memoria USB, paraguas o cualquier otro producto que sirva como regalo publicitario.
En el sector comercial y artístico se utiliza desde hace más de 100 años y se implementa, principalmente, para serigrafiar diseños en artículos y soportes promocionales.
A pesar de su artesanía, en los últimos años la serigrafía se ha modernizado, mejorando maquinaria y tintas que permiten obtener resultados de serigrafiado en calidad extrafina.
Por ello, cada día son más las empresas que deciden optar por la técnica serigráfica para personalizar con su logotipo camisetas, otras prendas y multitud de objetos que difunden su imagen allí donde estén presentes.

EL PROCESO DE LA SERIGRAFÍA
La serigrafía aplica color a un objeto con la ayuda de una racleta que hace pasar tinta a través de una fina malla o pantalla. Por cada color que se quiera estampar, necesitamos una pantalla adicional, es decir, funciona a través de capas.
Para realizar una impresión de serigrafiado, se usan distintos materiales: fotolitos, pantallas, racletas, tintas, objetos a estampar y secadores.
1. Elegir la imagen para la serigrafía
Se debe elegir una imagen para la serigrafía, teniendo en cuenta que cada color va en una capa distinta. Es el primer paso del proceso y en él es importante tener en cuenta la separación de colores del diseño.
Con el diseño elegido, se realiza la preparación del fotolito o fotolitos. Cada pantalla de serigrafía llevará un color por separado, que se debe imprimir en un fotolito. Estos pueden ser de diferentes materiales, siendo los más habituales las transparencias fabricadas en poliéster translúcido.
El fotolito siempre se imprime en un negro muy opaco y no puede contener grises, ya que estas tonalidades se pueden simular con tramas y medios tonos con programas de retoque fotográfico.
2. Crear la pantalla
Una vez impresos los fotolitos, se prepara la pantalla de serigrafía, que consiste en un marco de madera o metal con una malla de poliéster. Sobre la malla se aplica una emulsión fotosensible por las dos caras y se deja secar. Una vez seca, está lista para poder utilizarla.
Se coloca el fotolito sobre la pantalla y se pasa a la insoladora, donde se le aplica luz durante un tiempo determinado. Una vez expuesta la pantalla a la luz, esta se revela aplicándole agua directamente.
Así en las partes negras del fotolito, al aplicarle agua, la emulsión se separa, quedando una máscara por donde puede pasar la tinta. El proceso se repite para cada color del diseño.
3. Impresión
El serigrafiado puede ser de dos tipos: serigrafía manual o serigrafía automática. En la primera, como el propio nombre indica, el proceso se hace a mano, obteniéndose un mejor acabado ya que se realiza con más cuidado. La automática tiene sus ventajas, como que permite reducir el tiempo de producción.
Una vez se ha secado la pantalla, se coloca en la máquina o pulpo de serigrafía y se precintan los bordes del marco para facilitar la limpieza de la tinta sobrante.
Se aplica la tinta sobre la pantalla y se coloca el artículo a estampar bajo esta, sobre una tabla; pudiéndose usar plantillas para en cada tirada imprimir un mayor número de productos. La tinta aplicada en la pantalla se desplaza por medio de una racleta que lleva una escobilla de goma para facilitar el deslizamiento de la tinta sobre la pantalla. Si el diseño tiene varios colores, este proceso se realiza con cada color por separado hasta que se estampan todos.
Siempre que se aplica una capa con la tinta de la trama, se deja secar y luego se puede utilizar para una nueva aplicación. Este sistema permite repetir el proceso con toda precisión y rápidamente; de hecho, creando un modelo de placas, el serigrafiadopuede repetirse cientos de veces sin perder calidad y definición de impresión.
La tinta se deja secar al aire o curado en función del producto y de la tinta utilizada. El proceso es ideal para los colores planos sin variación de tonos.

VENTAJAS DE LA SERIGRAFÍA
Frente a otras soluciones de impresión, las ventajas que ofrece la serigrafía son:
- Solución económica (tiradas medias y largas) y duradera.
- Excelente relación calidad/precio para grandes tiradas.
- Se puede estampar en casi cualquier superficie.
- Reproducción del color perfecta.
- Durabilidad de los artículos.
- Excelente resistencia a los lavados.
- Agradable al tacto ya que se imprime la tinta directamente sobre el material.